Cuatro consejos para empezar con la fotografía subacuática

La fotografía subacuática existe por varias razones, siendo la más importante el deseo que compartir las vistas y momentos únicos que solo un buceador puede experimentar. Sin embargo, por muchas razones, el mundo bajo las olas puede ser un lugar difícil para sacar una buena foto. Si te interesa empezar a capturar el océano, aquí van unos consejos para empezar.

Empieza con una cámara pequeña.

Mientras mucha gente hoy en día tiene una buena cámara DSLR que saca buenas fotos sobre el agua, no intentes sacarlas bajo las olas. Empieza con una cámara más pequeña y compacta con opciones básicas sobre la apertura y el obturador. La fotografía subacuática puede ser cara y complicada y los que empiezan con una gran cámara no suelen seguir con el hobby. También te ahorrarás algunos dólares que podrás gastar en visitar a aquel gran sitio de buceo.

La fotografía subacuática se trata mucho de luz artificial.

No todas las fotografías bajo el agua requieren una fuente de luz artificial y de hecho muchas fotos premiadas se sacan sin luz artificial. Sin embargo, una luz estroboscópica o focos aumentará significativamente el rango de sujetos y tipos de fotos que puedes sacar. La regla general es gastar dos veces más en luces que en la cámara la primera vez que adquieres un equipo fotográfico. La mejor cámara puede ser inútil sin una luz estroboscópica. Hay muchas opiniones sobre luces estroboscópicas y focos, pero un buen comienzo es una luz estroboscópica sencilla y un foco pequeña. Desde ahí, puedes sacar fotos de casi todos los sujetas bajo el agua.

Pero primero la funda de tu cámara.

Desafortunadamente, no todas las cámaras en el mercado tienen fundas baratas y fáciles de encontrar. Algunas marcas de cámaras producen fundas para sus modelos, mientras otras se lo dejan a terceros. Por lo tanto, vale la pena comprar un paquete de cámara y funda, o comprobar que tu nueva cámara posee la opción para sumergirse en las profundidades del océano.

Practica con tu cámara.

Viajar al exterior a destinos de buceo tropicales con aguas azules claras es uno de los puntos clave de ser un buceador. A menudo a encuentras animales raros y preciosos que poca gente tiene la oportunidad de ver, pero también quieres disfrutarlo. Si no has practicado con tu cámara, puede que pierdas tiempo ajustando la configuración y te pierdas experiencias únicas y especiales. Practicar en un tu sitio de buceo local o simplemente en la costa antes de irte a esa inmersión tropical te permitirá capturar esos momentos de manera fácil a la vez que los disfrutas.

Sé un compañero de buceo respetuoso.

El buceo se trata de que todos se diviertan y es importante recordarlo cuando se empieza en la fotografía subacuática. Puede que quieras sacar la foto perfecta de un nudibranquio, pero tus compañeros de buceo pueden aburrirse; saca unas pocas fotos y sigue con la inmersión para que todos estén contentos, no solo aquellos que poseen una cámara sumergible.

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